Ingredientes: (Cantidad para dos personas)
- 2 tomates grandes y maduros.
- 1 pimiento verde.
- 1 cebolla pequeña.
- 2 dientes de ajo.
- 1/2 vaso de vino blanco.
- 1 vaso de arroz de grano redondo.
- Aceite, agua y sal.
Preparación:
Hacemos un sofrito con los tomates, el pimiento, la cebolla y los dientes de ajo, todo pelado y a trocitos y salamos. Cuando empieza el primer hervor añadimos el vino y medio vaso de agua aproximadamente para que haga un poco de caldo y lo ponemos a fuego medio. Cuando ha rebajado un poco el líquido echamos el arroz y mezclamos bien, añadiendo agua cada vez que sea necesario para que el arroz se cueza, mientras vamos corrigiendo de sal.
Cuando el arroz está en su punto apartamos del fuego y servimos.
(Os habréis dado cuenta de que ahora no es fácil encontrar tomates maduros. Lo cierto es que yo he utilizado el sofrito que congelé este verano).
¡¡Qué rico, Lola!! Un arroz buenísimo, me encanta así con el sofrito y el colorcillo que coge.
ResponderEliminarPor aquí estamos de tomates a tope, con el frío hemos tenido que quitar las plantas y ahora están extendidos en dos mesas y amenazan con madurarse todos de golpe, así que todas las recetas con tomate me siguen viniendo genial.
Besos.
Que buena pinta tiene el arroz, a mi también me encanta pero solamente seco, los arroces caldosos no me gustan nada de nada.
ResponderEliminarbssssssssss
Vaya Marhya, eres una de las pocas afortunadas que tiene tomates maduros, espero que esta receta te venga bien para usar unos pocos. Besos
ResponderEliminarArantxa, a mi también me gustan más los arroces secos que los caldosos. este es jugosito pero no queda ni demaisado suelto ni con demasiado caldo, creo que te puede convencer. Un beso
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